lágrimas podridas
Encontró un lugar como el que anhelaba,
y lo reconoció al no saber reconocerlo,
donde lo inhóspito era deseable,
y lo extraño extrañable...
y logró al fin sentir la dulzura de su llanto.
y lo reconoció al no saber reconocerlo,
donde lo inhóspito era deseable,
y lo extraño extrañable...
y logró al fin sentir la dulzura de su llanto.